Introduccion
Los teléfonos móviles son un objeto de deseo cada vez más universal y ya no hay que ser apasionado de la tecnología para interesarse por qué pantalla, procesador o sistema operativo cargan. Pero hay otras características que no se ven tanto, y que empiezan a cobrar relevancia a medida que la tecnología progresa.
Son las relacionadas con «las tripas» de los dispositivos móviles, sobre todo de los smartphones, pero también se aplica a las tabletas.
En los primeros teléfonos inteligentes, ya fueran Android, Symbian, BlackBerry, Windows Mobile o iOS, el procesador o las tecnologías aceleradoras de gráficos empleadas en su construcción apenas sí suscitaban interés. La tecnología se ocultaba tras la mera funcionalidad. Además, la escasez de terminales, junto con la falta de información que se tenía de los primeros procesadores ARM y de los pocos fabricantes que los firmaban, contribuían a ocultar los detalles tecnológicos.
Procesadores
Snapdragon820


Exynos8890
Este procesador de Samsung, que da vida a algunos Galaxy S7 de determinadas regiones -como lo últimos que saldrán a la venta en Europa- ocupa el tercer lugar de la lista de AnTutu, muy cerca del 2°. Cuenta con ocho núcleos, lo que –según la empresa coreana– le aporta un 30% más de rendimiento y un 10% más de consumo. La potencia gráfica de Exynos 8890 está a cargo de GPU Mali t880.
Kirin950